El cineasta sostiene que la industria cinematográfica debe dar más opciones a los consumidores

Álex de la Iglesia ha sido recibido con entusiasmo y calidez en Sitges, donde ha afirmado sentirse como en casa. El célebre director ha destacado el interés de un festival dedicado al cine de género, con público muy especial, y ha explicado algunas ideas detrás de su obra cinematográfica. Además, ha declarado que la industria cinematográfica tiene que dar más opciones al público español.

Asimismo, el director del Festival Internacional de Cine de Autor de Barcelona, Carlos Rodríguez, ha visitado Sitges para presentar el Catálogo de Cine de Autor. Con Ángel Sala, ha destacado la necesidad de que la producción, distribución y exhibición cinematográficas encuentren nuevas formas de articulación en el Estado.
El director Álex de la Iglesia ha afirmado sentirse «como en casa” en Sitges en la masterclass que ha ofrecido al público del Festival. El reconocido director ha agradecido las características de un evento íntegramente dedicado al cine de género, ha definido el terror, el fantástico y la ciencia ficción como sus géneros favoritos y en los que se siente más cómodo, y ha mostrado su satisfacción con Las brujas de Zugarramurdi. De la Iglesia ha calificado su última película de «comedia en una película de terror con monstruo al final».
El director también ha ironizado sobre la posibilidad de rodar la secuela, principalmente por el gancho que tendría el título » Zugarramurdos», una película que, hipotetiza, sería «todavía más de género», con «más monstruo y más aquelarre”. El director de «El día de la Bestia» ha sostenido que el cine se ha globalizado y democratizado con las nuevas tecnologías pero que, al mismo tiempo, cada vez es más difícil vivir de la profesión. A pesar de la admiración por las producciones low cost , De la Iglesia ha afirmado que es complicado que estas producciones menores «generen industria» . Asimismo , ha reconocido que el cine español está en crisis «desde siempre, pero ahora más». De la Iglesia, que también ha sido presidente de la Academia de Cine Española, ha recordado su participación en la institución con el orgullo de haber expresado sus opiniones y ha sostenido que el tiempo ha dado la razón a sus perspectivas, a pesar de que dimitió de la junto por no coincidir con la opinión mayoritaria. En este sentido, ha denunciado la falta de una oferta legal y razonable en la distribución cinematográfica española, y el imperativo de que la industria se adapte a las necesidades de los consumidores. En el apartado anecdótico, Carlos Areces, protagonista de «Balada triste de trompeta», se ha sumado a la mesa para explicar, en tono autoparódico, su desnudo en la película; posteriormente, Álex de la Iglesia ha comparado este desnudo con la exposición a la que se somete a un director de cine después de haber rodado una película, en alusión a recibir críticas negativas. Carlos Areces está en Sitges como parte del equipo de la película de Juan Cavestany «Gente en Sitios», que mañana se proyecta en las pantallas del Festival.
«Borgman» ha sido presentada este martes por el director de la cinta, Alex Van Warmerdam -quién el lunes recibía el premio Máquina del Tiempo por su trayectoria – y la actriz Annet Malherbe. Alex Van Warmerdam se ha mostrado complacido con el disenso en la interpretación del filme, a pesar de la sentencia bíblica con la que empieza y que guía su sentido («Los que han bajado a la tierra son los que engrosarán sus filas”). Van Warmerdam ha relatado también su intento por evitar que el montaje final tuviera tono humorístico. Además, ha insistido en la orientación presentista de sus películas, donde los personajes no tienen pasado y, según concluyó su esposa y actriz Malherbe, tampoco futuro. Según el realizador, la misión de sus personajes dibuja una espiral interminable y lúdica a través de los siglos sin una meta definida. Pese a no haber pretendido explícitamente incluir su película en los códigos del género de terror, ha admitido que «Borgman» ha sido clasificada frecuentemente por la crítica dentro del subgénero de las home invasion y, en este caso, las home invitation . El director ha expresado también su sorpresa por el reconocimiento que en los últimos tiempos ha recibido su obra, y ha bromeado acerca de la posibilidad que haber cumplido sesenta y un años le ha permitido «acceder en la lista de los directores de más 60 años» que las instituciones culturales empiezan a tomar en cuenta. Finalmente, ha reflexionado que sus obras, «sin darle explicaciones, tienen su propia vida», algo de lo que no siempre es consciente en su vida cotidiana. Hooked Up, película de Pablo Larcuen realizada íntegramente con un móvil, también se ha estrenado en el Festival, así como la esperada revisitación del giallo L’Étrange Coleur des larmes de ton corps.

Por su parte, el director del Festival Internacional de Cinema de Autor de Barcelona, Carlos Rodríguez, ha visitado Sitges para presentar el Catálogo de cine de Autor de Barcelona. El proyecto –con el apoyo de la institución intercomarcal- nace con la intención de promover un circuito alternativo para las películas de autor, y también impulsar la recuperación de salas de cine en un contexto económico que propicia su clausura. La iniciativa ya cuenta, de momento, con 18 espacios, algunos más allá de la demarcación provincial de Barcelona, para proyectar algunos de los filmes del catálogo. El catálogo para esta primera edición contiene producciones catalanas, europeas, norteamericanas y latinoamericanas que se han proyectado al Festival de Cine de Autor de Barcelona, y se prevé que el próximo año se amplíe con nuevos títulos de las ediciones 2013 y 2014 del certamen. El director de Sitges, Àngel Sala, ha destacado que el panorama actual de la industria cinematográfica es, especialmente en el estado español, «cambiante y confuso”, y que «las formas tradicionales de producción, distribución y exhibición son caducas”. De ahí que algunas películas que tienen éxito de público y crítica en Sitges luego no llegan a estrenarse en España, del mismo modo que no se han estrenado ni siquiera filmes de directores tan consolidados como Brian de Palma. Además de los hábitos de compra «raros” de las distribuidoras españolas, Sala ha destacado que las compañías internacionales tendrían que cambiar los precios y rebajarlo s de acuerdo con las posibilidades de la recaptación española. Precisamente, ha destacado que en este contexto adverso la iniciativa del Catálogo de Cine de Autor de la Diputació de Barcelona es extraordinaria.