LOCARNO RINDE HOMENAJA AL VETERANO DIRECTOR POLACO

El Festival de Locarno rinde homenaje este lunes al veterano director polaco Andrzej Wajda (Suwalki, 1926), responsable de títulos fundamentales del cine europeo de los 60, 70 y 80, como «Kanal», «Cenizas y diamantes», «Paisaje después de la batalla» o «El hombre de marmol» y que a sus 83 años sigue en activo.

Locarno ha estrenado el documental «Andrzej Wajda: Robmy zdjecie!» («Andrzej Wajda: ¡Silencio en el plató!»), de Maciej Cuske, Thierry Paladino, Marcin Sauter y Piotr Stasik, cuatro estudiantes de la Andrzej Wajda Master School of Directing, que efectúan diferentes miradas sobre el apasionante trabajo de su maestro, centrándose en sus últimas películas.
También, el Festival ha proyectado sus últimas películas, «Katyn» y «Tatarak», realizadas respectivamente en 2007 y 2008. En «Katryn», Wajda describe la masacre de más de 21.000 prisioneros de guerra polacos por las tropas soviéticas en 1940. En «Tatarak», desarrolla un monólogo doliente a cargo de la musa de Wajda, la actriz Krystyna Janda, cuando perdió a su marido a manos del cáncer.
En Locarno Wajda ha confesado que está escribiendo el guión de una nueva película. Veinte años después de la caída del comunismo, el premiado director polaco quiere hacer una película para defender a Lech Walesa y a su sindicato prodemocrático Solidaridad contra lo que el propio cineasta califica como «esfuerzos para reescribir la historia». Ya en sus películas «El hombre de marmol» y «El hombre de hierro», relató la lucha polaca por la democracia durante medio siglo de comunismo.
«No puedo aceptar una situación en que los verdaderos héroes de Solidaridad, hombres como Walesa quienes crearon un nuevo sistema político en Polonia, están siendo descalificados, escupidos, convertidos en objetos de manipulación. Creo que es mi deber como director luchar en contra de esto», ha dicho el octogenario director polaco.
Wajda ha dicho en Locarno que la protagonista central de su nuevo filme será «una mujer joven que descubre cómo funciona la política moderna», un tema que recuerda a «El hombre de marmol», film en que una estudiante revela el destino de un héroe comunista caído en desgracia. El propio Lech Walesa aparecía en la continuación de aquella película, «El hombre de hierro», realizada ya con el sindicato Solidaridad legalizado, en 1981, relatando las huelgas anticomunistas en el astillero Gdansk que finalmente, tras un período de ley marcial apoyado por Moscú, provocó el colapso del régimen comunista en 1989.