LA MGM ORGANIZA UNA SEMANA DE FESTEJOS EN UN HOTEL DE SAN DIEGO

La obra maestra de 1959 del austríaco nacionalizado norteamericano Billy Wilder, «Con faldas y a lo loco» (atrabiliaria traducción al castellano de «Some like it hot», una frase de Tony Curtis dicha en el film a propósito de gustos musicales) ha cumplido 50 años y el estudio MGM, asociado al Hotel del Coronado en la ciudad californiana de San Diego, han organizado una semana de festejos desde el pasado 17 hasta el próximo miércoles, 23.

Durante las jornadas, han asistido los pocos artistas vivos de la obra maestra en blanco y negro. Su protagonista Tony Curtis (en un triple rol: el saxofonista Joe, la arrebatadora señorita Josephine y también el falso heredero del imperio petrolífero Shell), que ha cumplido 84 años, y su productor, Walter Mirisch, de 88. En el camino se quedaron, Jack Lemmon (fallecido en 2001), que incorporaba al compañero de desventuras de Joe, Jerry, un músico de chelo, quien asume también el rol femenino de la deliciosa Daphne, enamoradora de millonarios. Por supuesto, el gran Wilder (ausente entre nosotros desde 2002), la sex symbol y actriz del Método Marilyn Monroe («suicidada» en 1963), el gran George Raft (temible como el capo Spats Colombo) responsable de los asesinatos del Día de San Valentín, de los que los desdichados músicos sin empleo son testigos a su pesar). También, el brillante coguionista I.A.L. Diamond, el compositor Adolph Deutsch (desaparecido en 1980) y el actor de la enorme bocota, Joe E. Brown, quien como el billonario Osgood E. Fielding III, cerró el film con la memorable: «Nadie es perfecto», cegado de amor por Daphne/Jerry. Las celebraciones permitieron la presentación del imprescindible libro «Some Like It Hot: The Official 50th Anniversary Companion», que ha coordinado Laurence Maslon.