Una historia de superación, de esperanza, de la necesidad de perdonar y de saber pedir perdón
Desde este lunes 1 de julio se rueda «Uno para todos», el segundo largometraje de David Ilundain («B de Bàrcenas»), durante 6 semanas, varias localizaciones de Cataluña (Barcelona, Arenys de Munt) y Aragón (Caspe). La película la protagoniza David Verdaguer («Verano 1993», «Los días que vendrán») a partir de un guion de Valentina Viso («María y los demás») y Coral Cruz («Incerta Glòria»)
El reparto lo completan actores infantiles seleccionados tras un largo cásting acompañados de Clara Segura («Una pistola en cada mano»), Patricia López Arnaiz («La peste»), Betsy Túrnez («El rey tuerto») y Ana Labordeta («Planes para mañana»)
David Verdaguer interpreta a un profesor interino que asume la tarea de ser tutor de sexto de primaria en un pueblo completamente desconocido para él. Cuando descubre que tiene que reintegrar a un alumno enfermo en el aula, se encuentra con un problema aún mayor: ninguno de sus compañeros quiere que vuelva a clase.
Producida por Inicia Films, Fasten Films, A Contracorriente Films, Bolo Audiovisual, Uno para todos AIE y Amalur AIE con la participación de TVE, TVC, Movistar+, Aragón TV y el apoyo de ICAA, ICEC, Gobierno de Navarra y MEDIA Europa Creativa, la película se estrenará el próximo año distribuida por A Contracorriente Films.
David Ilundain debutó en el largometraje en 2015 con la aclamada por la crítica «B de Bárcenas», tras una extensa carrera en publicidad, televisión, videoclips y largometrajes donde desarrolló diferentes puestos en el equipo de dirección. En su trayectoria además, ha escrito y dirigido diversos cortometrajes que acumulan premios nacionales e internacionales. Su primer largometraje consiguió tres nominaciones a los Goya y diversos premios como el Premio especial Feroz, el Premio Días de cine a la mejor película española y el premio de la Unión de actores para sus protagonistas, Pedro Casablanc y Manolo Solo.
En palabras de los productores, «Uno para todos» es «una historia de superación, de esperanza, de la necesidad de perdonar y de saber pedir perdón en un entorno en el que las diferencias culturales y generacionales son evidentes. El proyecto dirigido por David Ilundain plantea una pregunta esencial: ¿Para qué? ¿Para qué luchar y aprender? Si con esta luminosa película podemos ofrecer una respuesta, o mejor aún, si hemos permitido al espectador encontrar la suya propia, habremos logrado, sin duda, nuestra meta».
