RICARDO JOVEN interpreta a un inventor de la bomba atómica en estado de shock, que decide contarle a su desconocida hija su vida y sus reflexiones sobre su visión del mundo

«Einstein y el Dodo» nos introduce de lleno en la vida Albert Einstein al saber que la bomba atómica, que el había ayudado a producir, había sido lanzada aniquilando dos ciudades japonesas. En ese estado de shock Einstein se refugia en su estudio de Nueva York y desesperado trata de reiniciar la relación con la hija que abandonó en su juventud: Liesserl. Una hija a la que nunca vio, por lo que decide grabarle una cinta con su vida y reflexiones personales sobre su personalidad y su visión del mundo.

La obra se puede ver desde este miércoles 20 de junio en La Espada de Madera, la coqueta sala del barrio de Lavapiés de Madrid (calle Calvario 21). En ella Albert Einstein cruza sus descubrimientos científicos, la extinción del pájado dodo, y las consecuencias de la bomba atómica.
El montaje del monólogo corre a cargo de los aragoneses Teatro del Temple, que han combinado en su producción textos clásicos de la dramaturgia universal con textos de autores españoles contemporáneos. Es en esta segunda línea que se han puesto en escena textos del dramaturgo de la compañía, Alfonso Plou («Rey Sancho», «Goya, Buñuel, Lorca y Dalí», «Picasso adora la Maar» o «Yo no soy un Andy Warhol») junto a textos de Carlos Martín («L’Imperatore»), Maxi Rodríguez («Oé, oé, oé»), Antonio Orejudo («Ventajas de viajar en tren») o Luis Araújo («Trenes que van al mar»).
«Einstein y el dodo», escrita e interpretada por Ricardo Joven supone otra apuesta de esas características. Es la primera obra escrita por uno de nuestros actores más asiduo y relevante que, en los últimos años ha decidido abrir una vía de creación dramatúrgica desde su experiencia actoral y que tiene ya una obra más terminada (Full Moon Hotel) y otra que está en proceso de escritura gracias al proyecto de Fomento de la Literatura Dramática promovido por el Centro Dramático de Aragón («Blanco y Negra»).
En este caso es un texto muy relacionado con el trabajo actoral que hizo a partir del «Informe para una academia» de Franz Kafka y que él tituló «Yo, mono libre». Un monólogo muy intenso que Ricardo Joven supo encarnar con éxito en la producción de Teatro del Temple. La obra está dirigida por Carlos Martín, coordinada por Alfonso Plou, y con producción de María López Insausti.
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