TENÍA 81 AÑOS y en 2005 había recibido el Premio Donostia del Festival de San Sebastián

A consecuencia de un cáncer de páncreas ha fallecido en Nueva York este viernes 3 de febrero el actor Ben Gazzara. Tenía 81 años. Su última aparición en Broadway fue en el reestreno de «Awake and Sing!» en 2006. Gazzara participó en docenas de películas y todo tipo de programas de televisión, incluyendo el papel protagònista en la serie de 1960 «Run for Your Life». En 2005 había recibido el Premio Donostia del Festival de San Sebastián.

Criado en barrios pobres de Nueva York, Biagio Gazzara, conocido como Ben desde su infancia, creció soñando con convertirse en actor. Este hijo de un inmigrante siciliano destacó rápidamente en las clases de Erwin Piscator y en los cursos del Actors’ Studio, donde llamó la atención por una brillante y contenida sobriedad.
Gazzara comenzó a actuar en Broadway con pie tan firme que su primera aparición en escena («End as a Man», de Calder Willingham) le comportó el premio al mejor actor del año 1954. Fue igualmente nominado por sus dos trabajos siguientes, «Cat on a Hot Tin Roof» («La gata sobre el tejado de zinc caliente») y «A Hatful of Rain» («Un sombrero lleno de lluvia»), ambos en 1956. Rápidamente fue reclamado por la televisión, donde interpretó e incluso dirigió numerosas obras. En el cine debutó interpretando el cadete sádico de «The Strange One», de J. Garfein, consagrándose definitivamente al año siguiente, 1959, con «Anatomy of a Murder» («Anatomía de un asesinato»), de Otto Preminger, que fue nominada a siete premios Oscar.
John Cassavetes le consideró su actor favorito, encargándole personajes de psicología compleja que Gazzara enriqueció en todos los casos: «Husbands» (1970), «The Killing of a Chinese Bookie» (1976), «Opening Night» (1977). También repitió con Peter Bogdanovich: «Saint Jack» (1979) y «They All Laughed» («Todos rieron», 1981). A las órdenes de Marco Ferreri dio vida al protagonista de los cuentos de Bukowski en «Storie di ordinaria follia» («Ordinaria locura»), que inauguró el Festival de San Sebastián de 1981. Nunca ha dejado de colaborar con directores noveles: con David Mamet en «The Spanish Prisoner» (1997), con el cántabro Jesús Garay en «Els de devant» (1994), con Vincent Gallo en «Buffalo ‘66», con John Turturro en «Illuminata», o con Todd Solondz en «Happiness».
Cierto aura de outsider y un prestigio de actor indomable han configurado sus señas de identidad a lo largo de una dilatada carrera. Entre sus últimos trabajos destacan «Dogville» (2003), de Lars Von Trier, o el film colectivo «Paris, je t’aime» (2006). En 2005 había recibido el Premio Donosti del Festival Internacional de Cine de San Sebastián.