Protagonizada por Leonardo DiCaprio, es un regreso al thriller del director neoyorquino

Martin Scorsese firma su película más oscura, un thriller ambientado en una peninteciaría psiquiátrica situada en una aislada isla, en los años 50. El director muestra continuas referencias a maestros como Alfred Hitchcock, Orson Wlles, Jacques Tourneur, al cine negro de los 50 y a las producciones de terror de Val Lewton, entre otras. Con abundantes flash backs, con mentes enfermas e incluso con algún elemento sobrenatural, el director da una intensidad poderosa a escenas y personajes. A destacar la interpretación de Leonardo Di Caprio, en la que es su cuarta colaboración con el director de «Gangs de Nueva York”, «El aviador” o «Infiltrados”.
El filme adpta una novela de Dennis Lehane (el autor de los libros en que se basaron «Mystic river’ y «Adiós pequeña, adiós»), en la que nada de lo que sucede es inocente. Junto a Leonardo DiCaprio, Mark Ruffalo, Ben Kingsley, Emily Mortimer, Michelle Williams, Max von Sydow y Patricia Clarkson completan el brillante reparto.
En 1954 el agente federal Edward Daniels (Leonardo Di Caprio)se dirige a Shutter Island, una islña azotada por un huracán, donde está el Correccional Psiquiátrico Ashecliffe, en compañía de su compañero Chuck Aule (Mark Ruffalo), para investigar la extraña desaparición de una asesina demente. En el lugar pronto perciben que no son excesivamente bien recibidos y que el centro oculta más de un misterio. El director del manicomio (Ben Kingsley) se presenta como el psiquiatra bueno que trata de curar a sus enfermos a través del análisis terapéutico, mientras el codirector (Max Von Sydow) es el psiquiatra malo (y nazi) que recurre a la lobotomía para «aplacar» a sus pacientes. Pero, por supuesto, nada será lo que parece.
Scorsese ha ambientado la historia en los años 50 no por casualidad: «Si por algo me interesó la historia es porque es completamente actual», ha dicho en Berlín, para dejar claro que el tiempo pasa pero los paralelismos permanecen. Leonardo DiCaprio se ha mostrado feliz de este reencuentro con Scorsese: «Cada experiencia fue única. Ha sido una progresión, ya han pasado 10 años. El mejor regalo que me ha dado es el aprecio por el cine y la historia del cine y una perspectiva totalmente nueva de mi enfoque sobre esta forma de arte. Crecí en Nueva York realmente», ha dicho DiCaprio. «Siendo actor joven, habría sido insensato no aprovechar la oportunidad de trabajar con alguien a quien yo y muchos consideramos el director definitivo de nuestro tiempo».
Martin Scorsese tampoco ha escatimado elogios para su joven pupilo: «Dirigir a DiCaprio me ha permitido establecer con él una relación especial. La confianza es realmente la clave. Ambos hemos desarrollado una camaradería a partir de nuestro primer encuentro». Scorsese, de 67 años, ha añadido que «a DiCaprio le veo como un joven desarrollándose en un excelente actor. Estoy muy feliz de estar presente en este momento junto a alguien con un talento tan extraordinario».