«The Elephant to Hollywood» en la editorial Hodder&Stoughton
Será necesario ahorrar 20 libras esterlinas para hacerse con un ejemplar de su nueva autobiografía, «The Elephant to Hollywood» que firma como Michael Caine, aunque en realidad es sir Maurice Miklewhite, con el que nació hace 71 años en la más extrema pobreza. El futuro Michael Caine nació en el insalubre barrio de «Elephant and Castle», en el hospital para pobres.
Careció de todo, salió de la más absoluta nada y ha logrado ser uno de los actores más grandes del mundo. En este nuevo volúmen, haciendo gala de su idiosincrásico humor, narra como se convirtió por accidente en una estrella gracias a «Zulú». La dirigió el norteamericano Cy Enfield y se entrevistaron en el bar del «The Prince of Wales Theatre». Necesitaban a alguien aristocrático y…encontraron a un cockney. El director le dijo: «¿sabe hablar con acento pijo y montar a caballo?» Caine mintió y resulta hilarante como dió «pijo» y estuvo peleándose en el plató con un caballo, que le detestaba.
Estuvo a punto de ser despedido por retrasar la producción, pero el éxito de «Zulú» le llevó a «The Ipcress File» y el productor Harry Saltzman le ofreció un contrato por siete años. Su Harry Palmer hizo historia aunque desde Paramount se recibió un telegrama diciendo: «despedid a Caine, da maricón en la película». Después llegó la icónica «Alfie» en la que usó su acento cockney. Shelley Winters, su partenaire, dijo después que no entiendo nada de sus diálogos.
Tenía 32 años cuando el filme se estrenó en 1966 y fue un éxito cósmico. Con «The Italian Job» hizo su primer viaje promocional a los Estados Unidos. Otro éxito y ya todo fue imparable. Caine se codeaba ya con la alta sociedad y cuenta como durante una fiesta Elizabeth Taylor llevaba el tremendo diamante que Richard Burton le había regalado. Le halagó por la belleza de la pieza y ella, a carcajadas, le dijo que eran cristales, que el auténtico estaba en la caja fuerte de un banco.
En el set de «Escape o victoria» se tuvo que enfrenar a un Sylvester Stallone en plan diva. Estaba ya escribiendo «Rocky 3», era una estrella y llegaba siempre tarde. Una bronca fenomenal le convirtió en un actor puntual. Finalmente, comenzó a salir con Nancy Sinatra, la hija de Frank. El «viejo ojos azules» era un padre celoso y le amenazó al mujeriego actor seriamente. Más tarde se hicieron íntimos. Caine confiesa que es porque le hacía reir. Pasaban tiempo juntos y Frank le preguntaba, «¿cuántas películas has hecho hoy?» y Caine le contestaba: «Sólo una Frank, sólo una»
