Daniel Michael Blake Day-Lewis nació en Londres el 29 de abril de 1957 en el seno de una familia de origen judía relacionada con la literatura y el mundo del espectáculo: Su abuelo materno, Sir Michael Balcon, era un importante productor del cine británico y fue director de los estudios de cine Ealing. Su padre, Cecil Day-Lewis, era poeta de Su Majestad y su madre, Jill Balcon, es una actriz de teatro. Al necer, su padre le escribió un poema llamado «The newborn», que icluía versos como estos: «Qué pedacito de hombre he tenido, / ¡qué potencia tiene, / aunque sin fuerza todavía y desnudo como / una nuez sin cáscara!”.Su carrera empezó con una breve aparición en la película «Sunday Bloody Sunday» en 1971 cuando era un adolescente, por el que cobró 5 libras. Estudió en Greenwich, Londres, y en Sevenoaks School, Kent.
Pasa por diferentes colegios, donde descubre el teatro, involucrándose más y más en los montajes de obras escolares, a la vez que cultiva su otra gran pasión, la carpintería. Interpreta al príncipe Florizel en «Cuento de invierno», de Shakespeare, y ésa es la primera y última vez que su padre le vería actuar. El poeta murió de cáncer en mayo de 1972, mientras Daniel, que había regresado corriendo del último internado, le cogía de la mano.
Cuando terminó el colegio, en 1975, Daniel tiene que plantearse qué hacer con su vida. Y opta por probar suerte en aquello que más le gustaba: la carpintería. Pero se cruza en su vida uno de sus viejos maestros que le hace decantarse hacia la escuela de teatro Old Vic de Bristol.Forma parte de la forma parte de la Royal Shakespeare Company. Tras algunos papeles poco destacables consigue en 1982 una pequeña aparición en la superproducción «Gandhi», a las órdenes de Richard Attemborough. Posteriormente hizo varios papeles en teatro y para series de la BBC hasta que en 1985 se consagró con dos papeles: uno era el de punky londinense y homofobo que mantiene una relación con un antiguo amigo del colegio en «Mi hermosa lavandería» y el de un dandy llamado Cecil Vyse en «Una habitación con vistas» en la que trabajó con muchos de los mejores actores ingleses.
Su fama se afianza con películas como «La insoportable levedad del ser», con Juliette Binoche hasta que en 1989 le ofrecieron el papel de Christy Brown, un artista irlandés discapacitado en «Mi pie izquierdo», bajo dirección de Jim Sheridan. Con el personaje gana un Óscar y es nominado para los Globos de Oro. además Lewis acabaría renunciado a su nacionalidasd británica para convertirse en ciudadano de Irlanda
Con el irlandés Jim Sheridan, colaboró en otras dos ocasiones, en la película «En el nombre del padre», en 1993 basado en el tema real de los Cuatro de Guilford acusados injustamente de pertenencia al IRA, con Emma Thompson y por la cual consiguió otra nominación al Óscar además de otras nominaciones y premios, y «The Boxer» en 1997. Tras esta película el actor se instala en Florencia y trabajó como aprendiz de un zapatero durante casi cinco años a quien, se dice, Day-Lewis daba a cambio clases de interpretación.Sin embargo es reclamado por Hollywood, donde protagoniza «El último mohicano» que dirige Michael Mann de 1992, película que le dio un impulso a su ascendente carrera; posteriormente protagoniza en 1993 «La edad de la inocencia», a las órdenes de Martin Scorsese, «El Crisol» de 1996 o «Gangs of New York» de 2002, de nuevo con Scorsese y que le proporcionó su tercera nominación al Óscar por su trabajo como Bill el Carnicero.
Tras una relación con la actriz Isabelle Adjani (1989-1994), con la que tiene un hijo, Gabriel Kane, y otras con actrices como Julia Roberts o Winona Ryder, está casado desde 1996 con Rebecca Miller, hija del dramaturgo Arthur Miller, con la que tiene dos hijos.
Precisamente Rebecca Miller le dirigió en «The Ballad of Jake and Rose» («Nunca te dejaré»), película que narraba la vida de un padre con una enfermedad terminal y un pasado hippie, que vive junto a su hija en lo que queda de una comuna creada por aquel movimiento en los ´70.Considerado el mejor actor de su generación, Daniel Day Lewis es un actor muy exigente, que ha rechazado proyectos muy atractivos en el que no se veía actuando: Entre los proyectos que rechazó destacan: «El Señor de los anillos», «Shakespeare in Love», «Philadelphia», y «Solaris», entre otros. Fue considerado por Joel Schumacher para tomar el papel de Batman en la película «Batman Forever» después del abandono de Michael Keaton. Se interesó por interpretar el papel de Vincent Vega en la película «Pulp Fiction», aunque finalmente fue John Travolta quien obtuvo el papel.
Es conocido por preparar concienzudamente sus personajes, por sumergirse en ellos de manera casi patológica, lo cual le ha creado cierta fama de lunático. Para su papel de tetrapléjico en «Mi pie izquierdo» se fue a vivir a una casa en Dublín junto a un centro médico para personas con discapacidades (del que luego se convirtió en benefactor) y pasó meses estudiando a los pacientes. Aprendió a pintar con un cuchillo sujetado por dos dedos de su pie, y en el rodaje no se levantaba de la silla de ruedas ni en las pausas, obligando a miembros del equipo a llevarle de un lado a otro e incluso a darle de comer con una cuchara.
Para meterse en la piel de Hawkeye, el inglés adoptado por guerreros indios en «El último mohicano» (Michael Mann, 1992), ganó diez kilos de músculo, y aprendió a pescar, a despellejar animales y a construir una canoa. En el rodaje no se separaba de su rifle, que aprendió a cargar y disparar mientras corría. Para rodar «El crisol» (1996) se fue a vivir al pueblo que se había construido como decorado en una isla de Massachusetts; sin agua ni electricidad, levantó con sus propias manos la casa de su personaje y cultivó la tierra con aperos del siglo XVII. Para «En el nombre del padre» perdió 15 kilos de peso a base de raciones carcelarias y pasó dos días con sus noches sin comida ni bebida en la celda del set de rodaje. En «The boxer» aprendió a boxear con tanto ímpetu que acabó con la nariz rota y una hernia discal. Para «Gangs of New York» aprendió el oficio de carnicero y el arte de lanzar cuchillos.Su forma de entender la interpretación le hace sentirse más cómodo en un rodaje que sobre las tablas de un teatro. En 1989, en medio de la representación del «Hamlet» de Shakespeare en el National Theatre, metido en la piel del príncipe de Dinamarca, Day-Lewis entró en crisis escapando del escenario. No ha vuelto a subirse a uno.
En 2007 estrenó «There Will Be Blood» («Pozos de ambición»), basada en la novela «Oil!» de Upton Sinclair, dirigida por Paul Thomas Anderson, por la que ganó su segundo Óscar al Mejor actor y el Globo de Oro al Mejor actor en la categoría de Drama. Sus primeras críticas fueron bastante entusiastas, catalogándola incluso como una de las mejores películas de los últimos años.En 2010 protagonista de «Nine», una adaptación de «Fellini 8 1/2» en clave musical, dirigida por Rob Marshall («Chicago», «Memorias de una Geisha»). En la Película, Day Lewis interpreta a Guido Contini, un director italiano casado al que le gustan las mujeres. La película tiene un reparto de auténtico lujo: Nicole Kidman (Óscar por «Las horas»), Judi Dench (Óscar por «Shakespeare in Love»), Marion Cotillard (Óscar por «La vida en rosa»), Kate Hudson (nominada al Óscar actriz de reparto «Casi famosos»), Penélope Cruz (Óscar por «Vicky Cristina Barcelona»), Sophia Loren (Óscar por «Dos mujeres») y Fergie (la polifacética cantante del grupo The Black Eyed Peas).
Es Abrahan Lincoln en la película de Steven Spielberg sobre el asesinado presidente nerteamericano y, aunque es un actor que cada vez la cuesta más ponerse delante de una cámara, cnfía en volver a trabajar con Scorsese. Tiene fama de ser algo excéntrico y muy tímido e introvertido; al parecer elige sus trabajos con sumo cuidado lo que colabora a que se haya consolidado como uno de los actores más versátiles del panorama del cine actual. Desde principios de los noventa vive en Irlanda, en el campo, en un casa georgiana de cinco habitaciones llamada Castlekevin, a los pies de las montañas Wicklow.
