La academia de Hollywood también ha entregado premios honoríficos a Jean-Luc Godard y al historiador Kevin Brownlow, por sus trabajos en la industria del cine

La Academia de Cine de Hollywood entregó ayer los Oscar honoríficos a cuatro veteranos del cine, entre ellos los directores Jean-Luc Godard, que no asistió a la ceremonia, y a Francis Ford Coppola. Junto a ellos también recibieron el galardón el actor Eli Wallach y el historiador Kevin Brownlow. En esta «reunión de Padrinos», también estvieron presentes Robert De Niro, Robert Duvall, Clint Eastwood, Warren Beatty, Annette Bening, Marisa Tomei y Oliver Stone entre otros destacados rostros populares de Hollwood.

El director de «El Padrino» recibió el premio más importante de la noche al ser galardonado con el premio Irving G. Thalberg, por sus visionarias producciones. George Lucas, creador de la saga «Star Wars», explicó cómo Coppola, guionista de «Patton» y director de «Apocalypse Now», había sido su mentor y dijo también que Coppola había abierto nuevos caminos para muchos de sus contemporáneos a finales de la década de 1960 y parte de los 70.
«Fue nuestro líder, nuestra inspiración», dijo Lucas antes de entregarle a Coppola el premio Thalberg, que es considerado el más alto honor de la Academia. Coppola, sentado junto a su mujer Elenor, su hijo Román y su hija Sofía, subió al escenario y abrazó a Lucas, comparándole con un hermano menor. «Siento un gran amor por la tradición original deHollywood», dijo Coppola.
Esta ceremonia es la segunda en la que la Academia entrega los Oscar honoríficos y la estatuilla de Thalberg en los Governors Awards, ya que hasta el año pasado estos galardones eran concedidos en la misma noche que los clásicos Oscar. Sin embargo, en un esfuerzo por acelerar la ceremonia anual de los premios cinematográficos más importantes del mundo, que se entregarán el 27 de febrero, la Academia decidió pasar los honoríficos a noviembre para iniciar la temporada de los Oscar.
Este año, la decisión por parte de la Academiade entregar un Oscar honorífico al director franco-suizo Jean-Luc Godard provocó cierta agitación entre la población judía, que cree que es un antisemita, así como también en ciertos grupos deHollywood, debido a que el director había mostrado durante mucho tiempo su rechazo por la elegancia y el glamour deHollywood.
Godard, de 79 años y uno de los directores pioneros de la nouvelle vague francesa con películas como «Al final de la escapada» en la década de 1960 que impulsó los límites del cine, no quiso asistir a la ceremonia de entrega de los premios.
Por su parte, el actor Eli Wallach, que tiene 94 años y se encuentra aún trabajando, recibió otro de los premios honoríficos por el amplio número de películas para las que trabajó, desde 1956 con «Baby Doll» hasta «Vidas rebeldes», «El bueno, el feo y el malo» y la reciente «Wall Street: el dinero nunca duerme».
El director de ésta última, Oliver Stone, dijo que Wallach era un «gran actor» que podría asumir muchos papeles de películas y manejar hábilmente cada uno de ellos. Eastwood, con quien protagonizó «El bueno, el feo y el malo», calificó a Wallach como «un gran artista y un gran amigo». Robert De Niro bromeó: «Eli, ahora que competimos por los mismos papeles, espero que sigamos siendo amigos». «No actúo para vivir, vivo para actuar», respondió Wallach, besando su estatuilla,