«Una buena película es la que consigue emocionar al espectador, hacerle cómplice de la historia y de las emociones de sus personajes”, asegura la directora

La directora Chus Gutiérrez ha llegado al Festival Internacional de Cine Cinema Jove para recibir este viernes 24 de junio el Premio Luna de Valencia con el que se reconoce su talento cinematográfico. El Festival ha dedicado en esta edición una retrospectiva a la cineasta y guionista granadina y proyecta su filmografía completa.

Recibir el Premio Luna de Valencia es para la directora y guionista Chus Gutiérrez (Granada, 1962) no sólo un «honor”, sino también una vuelta a los orígenes: «Recuerdo mi participación en Cinema Jove en 1993 con mi primera película, «Sublet», galardonada con el segundo premio, y la energía y confianza que me dio para enfrentarme al futuro”. Además, recuerda, «en esos días me enteré que estaba embarazada y el premio económico fue como el pan debajo del brazo que dicen traen los hijos y las óperas primas”.
Chus Gutiérrez pertenece a esa generación de cineastas que se abrieron camino en los años ochenta con una voz cinematográfica propia que no ha hecho más que crecer. La directora, caracterizada por su espíritu inquieto y combativo, es autora de una decena de películas. Su cine apela al perfil humano con un especial interés en el mundo femenino, una mirada que articula toda su heterogénea filmografía con títulos como «El Calentito», «Alma Gitana», «Retorno a Hansala», «Poniente» o «Insomnio». «El lado femenino no es algo intencionado en mi cine, sólo cuento el mundo a través de mi condición de mujer. Con frecuencia, en las películas dirigidas por hombres los personajes están estereotipados. Una buena película es la que consigue emocionar al espectador, hacerle cómplice de la historia y de las emociones por las que atraviesan sus personajes. Yo intento hacer buenas películas, otra cosa es que lo consiga…”.
Respecto a la situación del cine español actual, la cineasta sostiene que el panorama a nivel financiero es un «autentico desastre”: «Estamos en un momento de transición difícil y con un modelo económico que ha dejado de funcionar. Se pueden hacer grandes películas sin presupuesto o de muy bajo presupuesto, pero las producciones medias, o sea, la mayoría de las producciones españolas, están en peligro de extinción”. Frente a ello, Gutiérrez destaca que España cuenta con grandes talentos: «Tenemos directores y directoras con reconocimiento internacional, aunque es curioso que nuestro cine y talento se reconozca más fuera que dentro de nuestro propio país. Creo que siempre hemos tenido un problema de autoestima. Es una lacra cultural que deberíamos quitarnos de encima cuanto antes”.