La obra del venezolano Gustavo Ott regresa a Madrid 10 años después de su estreno, rindiendo homenaje a la amistad

Este jueves 8 de julio ha regresado a la sala pequeña del Teatro Compac Gran Vía «Dicorciadas, evangélicas y vegetarianas», un espectaculo de mujeres que luchan contra su pasado y los hombres que estuvieron en sus vidas, escrita por Gustavo Ott y representada por Profetas de Mueble Bar, que permanecerá en escena hasta el 29 de agosto.

En esta segunda obra del venezolano Gustavo Ott («Gorditas») tres mujeres -Beatriz, Gloria y Meche- en lucha con el pasado, con sus ex hombres y con el mundo en general, batallarán desde muy diferentes campos pero con un mismo objetivo: alcanzar la liberación de sus vidas. Una mujer divorciada, romántica y soñadora; otra, evangélica, y una tercera vegetariana comprobarán en su propia piel que, a pesar de las diferencias, en grupo sabe más el triunfo y se salvan mejor las penas.
«Es una obra muy refrescante, ideal para el calor madrileño», asegura Fernando Navas, quien dirige y produce la función junto a Juan Ramón Pérez y Carmelo Alcántara. Del reparto original de la versión española del texto, ha permanecido sólo Mari Carmen Sánchez, según ha recordado Juan Ramón Pérez, para quien «la sociedad ha evolucionado» desde entonces. «Se ha vuelto muy actual porque hace diez años no se hablaba tanto de violencia de género por ejemplo», ha puntualizado. «Y, a pesar de ser una comedia, no tratamos estos temas de manera frívola», ha añadido Mari Carmen Sánchez.
La obra, que rinde homenaje a la amistad, se estrenó en Madrid hace 10 años y desde entonces ha recorrido los escenarios de toda España.