Biopic de Hart Crane, torturado hijo de un riquísimo hombre de negocios de Cleveland, que se suicidó a la temprana edad de 32 años

Todavía no se han acallado los comentarios acerca de su penosa actuación como maestro de ceremonias de los últimos Oscar junto a Anne Hathaway, de la que se dijo que había ejecutado bajo la influencia de los psicotrópicos. Al actor de «Superfumados», que fue saludado hace años como un nuevo James Dean, le va la polémica y se ríe hasta de su sombra. Este artista prolífico, escritor y graduado universitario (aunque se dormía en clase) ha presentado esta semana en el Festival de Cine de Los Angeles su último trabajo a bordo de «The Broken Tower».

En la película encarna a un personaje real, un poeta obtuso llamado Hart Crane, torturado homosexual hijo de un riquísimo hombre de negocios de Cleveland, que se suicidó en 1932 a la temprana edad de 32 años.
Franco, que ya fue el poeta homosexual Allen Ginsberg en la estupenda «Howl» y novio de Sean Penn en «Su nombtre es Harvey Milk» ha escrito, dirigido, producido y protagonizado el film, rodado en blanco y negro para hacer justicia a la época. A Franco le atrajo la difícil poesía de Crane, que escritores geniales como Eugene O’Neill y Tennessee Williams admitieron no pudieron entender. Intensamente influídos por los románticos, así como por Whitman y Poe, los versos de Crane estaban cargados de intrincadas metáforas, incluso versos en blanco y temas homosexuales. Franco admitió que apenas entendió algunas piezas de Crane, y no enteramente. Dijo en Los Angeles durante la presentación: «Su poesía me resulta difícil de entender. No podría ahora mismo explicar de qué va. Pero me ha inspirado su espíritu y dirección en la vida y la muerte. Se preocupaba mucho de su obra aunque nadie la entendiera». Pero se entiende el interés de Franco, desde que estudiara literatura y escritura en la universidad UCLA y se graduara por Columbia en inglés.
También ha estudiado estas materias en el Brooklyn College y el Warren Wilson College mientras que sigue con su doctorado por la universidad de Yale. A Franco le gusta caminar rutas difíciles. Eso le hace un actor tan diferente e interesante.
Y este es su tercer escritor homosexual, lo que ha levantado la controversia acerca de su propia sexualidad. La película dura 99 minutos y captura la vida de Crane, con explícitas escenas sexuales, ataques de ira bajo el alcohol, bajones depresivos y genialidad literaria. El título de la torre rota proviene de la última creación de Crane, mientras mantenía una relación con la mujer de un amigo, su única relación heterosexual, y también se ha inspirado Franco en la biografía de Paul Mariani sobre el poeta. El momento más arriesgado del filme es los 10 minutos en que Franco/Crane lee en alto su propia poesía. Explica Franco que fue para que el público capture la esencia y estilo de la escritura de Crane en estado puro. «A Crane creo que le hubiera gustado», dijo. La recepción del film ha sido mixta, para satisfacción de su autor. Y es que a James Franco lo que más le divierte es provocar. Tocar las narices, vaya.