El proximo Festival de Cannes recuperrá siete de las películas del cineasta, en presencia de Malcolom McDowell
La exposición Stanley Kubrick es la más importante que se haya dedicado nunca a un director: miles de archivos distribuidos entre dos pisos para una superficie total de 1.000 metros cuadrados trazan toda la trayectoria de este maestro del séptimo arte. Gracias a una presentación cronológica, los visitantes van pasando por los diferentes universos de sus películas y pueden seguir la evolución de su obra, desde sus primeros cortometrajes hasta su última película, «Eyes Wide Shut», desde el peplum hasta la película de terror, pasando por sus clichés cuando todavía no era más que un fotógrafo de prensa.
La exposición descubre los disfraces de los monos de «2001: una odisea del espacio», la mítica hacha de Jack Nicholson en «El resplandor», los guiones, los decorados, las fotos de los rodajes e incluso algunas cartas de fans, al ritmo de los extractos musicales más conocidos de su filmografía, que le dan un aire todavía más realista a la atmósfera tan especial de sus películas. Hasta el 25 de mayo, tiene lugar simultáneamente una retrospectiva integral, así como conferencias y mesas redondas sobre la obra de Stanley Kubrick.